Un investigador australiano dijo que el controvertido procedimiento de infertilidad conocido como fertilización in vitro puede conducir a un mayor riesgo de infertilidad y cáncer en los niños concebidos a través del procedimiento.
John Aitken, un experto de renombre mundial en fertilidad masculina, advirtió sobre los efectos negativos del uso excesivo de la fertilización in vitro, o FIV, para concebir, reporto el periódico Sydney Morning Herald. En la última década, las parejas que experimentan infertilidad o que esperan hasta más tarde en la vida para quedar embarazadas han recurrido cada vez más a la FIV para concebir.
El procedimiento consiste en recoger espermatozoides y huevos y usarlos para crear embriones humanos vivos fuera del útero; Los embriones entonces se implantan en el vientre de la mujer. Uno de los problemas con el procedimiento es que la mayoría de las parejas tienen más embriones creados de los que van a utilizar. A veces los embriones sobrantes son destruidos o donados a la investigación. Otros creen que el procedimiento ha vuelto un producto la vida humana.
Aitken dijo que los niños concebidos a través de la FIV y nacidos también están siendo afectados. Dijo que el procedimiento de infertilidad, que es utilizado por una de cada seis parejas en Australia, está produciendo una nueva generación de niños infértiles. También señaló a la investigación que muestra que los niños varones concebidos a través de la FIV de padres de edad avanzada son más propensos a contraer cáncer. "Hay una compensación negativa", dijo Aitken, citando una nueva investigación en Bélgica sobre la infertilidad masculina. "Si usted tiene un hijo de este proceso, es posible que él también tendrá la misma patología que usted tenía." Los estudios también han vinculado la FIV con el síndrome de Down y otros trastornos genéticos.
Un estudio de 2008 de los Centros para el Control de Enfermedades encontró un mayor riesgo de defectos de nacimiento entre los niños concebidos a través de la FIV.
La clínica Mayo informa que también puede aumentar el riesgo de nacimientos múltiples, lo que puede tener efectos negativos sobre los bebés, incluyendo el nacimiento prematuro y bajo peso al nacer. Aitken expresó su profunda preocupación por la gran dependencia de la sociedad en la concepción asistida a través de procedimientos como la FIV.
En Australia, uno de cada 25 bebés ahora nacen después de haber sido concebidos mediante fertilización in vitro, según el informe. La tasa en la que las parejas usan FIV está aumentando también en los Estados Unidos. Aitken culpó a la industria de la infertilidad por ignorar que los problemas de infertilidad masculina a menudo son culpables, y que la FIV no siempre debe ser la solución. "Es una inexorable tendencia al aumento. Estamos recurriendo a la FIV en números cada vez mayores y lo que tenemos que recordar como una sociedad es que cuanto más usas la concepción asistida en una generación, más vas a necesitarla en la próxima ", dijo.
Otra preocupación bioética con la FIV es la detección de problemas de salud de los gametos y embriones, así como cualidades deseadas por la pareja. Algunos temen que las parejas estén usando esta tecnología para elegir los rasgos de su hijo.
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